El último pupitre

¿Te sientes decaído? ¿Te fallan las fuerzas? ¿Eres incapaz de correr los 100 metros lisos en menos de 6 segundos?

¡No te preocupes! ¡Ahora es muy fácil conseguir ser ese superhombre que siempre quisiste ser!

¿Entrenando duro? ¡No, nada de eso!
¿Tomando actimeles y ceregumiles? ¡No, nada de eso!
¿Llevando una pulsera Power Balance?

Unos 35 € de energía holográfica

Está bien, quizás eso sirva pero son muy caras. Nosotros te proponemos hacer tu propia pulsera Pagüer Balans en tu casa y sin gastarte nada de nada. Tan sólo tienes que seguir este tutorial:

Materiales necesarios:

1. Pegamento.
2. Una pulsera (o cualquier cosa que te puedas poner en la muñeca).
3. Dos hologramas (los mejores son esos que salen en las bolsas de patatas).

 Pasos a seguir:

1. Primer paso: con el pegamento pegamos los hologramas en la pulsera.

¡Listo! Ya tenemos nuestra propia pulsera, cuyo poder holográfico nos ayudará a hacer todo lo que antes no podíamos. ¡Por fin podrás tocar el piano!*

No gastes dinero en caras pulseras y fabrícate ya tu Pagüer Balans. Que la crisis no te prive de tu derecho a ser un ignorante.

* Disclaimer: quizás para tocar el piano debas tomar clases antes, eso sí, llevando tu pulsera.

Según fuentes cercanas al ministro, Moncloa está barajando seriamente la posibilidad de cesar a José Blanco al frente de Fomento para poner en su lugar a Pedro Aurelio Jiménez Mayo, sargento de infantería del ejército español.

Moncloa no ha hecho otra cosa que seguir la tesis que Blanco defiende desde hace tiempo. Del mismo modo que los controladores aéreos militares pueden aprender rápidamente el trabajo de sus homólogos civiles, el sargento podría aprender el trabajo de Blanco en apenas cinco minutos. Y lo que es más importante, el sargento cobra mucho menos que José Blanco y, por pertenecer al ejército, no puede quejarse si pisotean sus derechos.


Quizás ahora Blanco, y otros como él, dejen de amenazar a los trabajadores. Y quizás también dejen de enviar el rastrero mensaje de que el trabajador debe olvidar sus derechos porque hay un militar esperando a ocupar su puesto.

Al parecer, la siguiente en ser cesada será Pajín. Como sustituta sube posiciones Belén Esteban. En el PP ya han tomado nota y muchos están actualizando sus curriculums, entre ellos, Sáenz de Santamaría y hasta el mismo Rajoy.

¿Quién ha ganado el debate sobre el estado de la nación? Esa es la pregunta que siempre nos hacen los medios cuando nuestros queridos diputados no tienen nada mejor que hacer y acuden a ese hemiciclo, normalmente vacío.

Yo hace tiempo que no me hago esa pregunta porque con los políticos que tenemos no hay duda alguna:

La FIFA se ha reunido hoy con carácter de urgencia con Jaime Lissavetzky, secretario de Estado para el Deporte, y Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol, para tratar la desaparición del Trofeo de la Copa Mundial de la FIFA en las celebraciones de la selección en el día de ayer.

No hace falta resaltar la gravedad de este hecho ya que este trofeo,  de oro de 18 quilates, nunca había sido extraviado y tan sólo cuenta con un precedente, el trofeo Jules Rimet, utilizado hasta 1970 como premio al campeón mundial, y que fue robado en 1983. Está prevista una rueda de prensa esta misma tarde para dar explicaciones sobre lo sucedido.

Según fuentes policiales ya se han producido varias detenciones. La línea de investigación que se está siguiendo parece indicar como grandes sospechosos a los organizadores y participantes del acto de celebraciones a orillas del Manzanares.

Como todos los espectadores pudieron ver, los organizadores dejaron protagonismo a los héroes del Mundial una pequeña parte del evento mientras que el resto lo rellenaban con el más puro merchandising, en este caso de artistas españoles, con Bisbal a la cabeza. La policía está revisando los vídeos haciendo hincapié en la forma en la que los artistas invitados al evento aprovecharon la ocasión para salir a chupar cámara y apoderarse del trofeo.

También se investiga a ZP por botar de una forma tan ridícula en el acto de la selección en Moncloa, además de por no ceder el micrófono a Iniesta hasta no terminar de pronunciar toda su propaganda electoralista.

¡Es mi tesoro, es mío!

Llegados a este punto supongo que no habrá nadie asustado aún por mi titular. Comprendo que todos queremos tener nuestro momento de gloria pero ayer era el de la selección española de fútbol y era eso lo que los aficionados de este equipo, españoles y extranjeros, querían ver ayer. Ni a ZP, ni a Latre, ni a Bisbal y compañia. Querían ver a la selección.

También comprendo que tienen un guión y entiendo su euforia. Estoy seguro de que a los jugadores y al resto del equipo técnico no les importó compartir ese momento con estos arrimados. Pero no es tan complicado saber estar y comprender que los aficionados querían el ¡camarero! de Reina y oír a los héroes. Lo demás, simplemente, sobraba.

Aún así, esta gente es muy grande y nos dejaron grandes momentos: como ver a los jugadores con las infantitas; ver al hijo de Del Bosque disfrutando de su sueño y ver que Xavi no se separó de él en todo el día; apreciar de nuevo la simpatía de todo el equipo; mordernos los labios al comprobar la pequeña borrachera que algunos llevaban y cómo no, asistir por fin al deseado mini show de Pepe Reina, esta vez con la tan deseada y merecida Copa del Mundo. Que la guarden bien.

Resultó irónico ver a los holandeses protestar al árbitro en los últimos minutos del partido. Quizás no protestaban, quizás le estaban dando las gracias por dejarles estar allí y no haberlos expulsado a todos. Más tarde el seleccionador, Van Marwijk, insinuó en sus declaraciones que España fue tan dura como Holanda. Puedo elegir muchas fotografías para callarle la boca pero usaré ésta:

Creo que pocos se atreverán a decir que España no es el justo vencedor de este mundial. Y lo es porque ha demostrado que juega mejor que el resto, porque ha controlado los nervios, porque ha remontado desde una mala salida, porque se ha levantado una y otra vez después de cada salvaje patada, porque ha sabido sufrir hasta el final sin perder la confianza ni un segundo...

Hoy no sólo los amantes de la selección española de fútbol debemos estar contentos. También deben estarlo aquellos que disfrutan con todo lo bueno del fútbol y de cualquier otro deporte. Y deben estar contentos también aquellos que no aceptan la maquiavélica frase de "el fin justifica los medios".  Porque la selección española ha mostrado al mundo entero que se puede conseguir éxitos sin jugar sucio.

El premio a España es el premio a todos esos (que son muchos) que luchan cada día contra la tentación de elegir el camino fácil, el de las patadas, el de las trampas, el de la corrupción. Aquellos, que como este equipo, salen cada mañana a jugar duros partidos en los que los muelen a patadas y el árbitro premia al infractor.

Hoy podemos estar contentos y orgullosos porque volvemos a recordar que se puede jugar bonito y ganar, en el fútbol y en la vida. Por enseñarnos que los sueños se cumplen, por volver a mostrarnos el camino, por hacernos felices, GRACIAS.

Actualización.
España gana el premio "fair play" del mundial. Y eso que todos vimos la entrada tan dura que hace Xabi Alonso, con el pecho por delante. ¡Casi le rompe los tacos al pobre De Jong!

Además, Iker gana el guante de oro. Lástima que el balón de oro y la bota de oro del mundial se nos hayan escapado.

¡Cómo juega este equipo! El arte hecho fútbol. Y con el complemento perfecto para esa exquisitez, un complemento que aportan hasta los más pequeños del equipo, sin parar de presionar y luchar hasta el final.
La selección española de fútbol auna eso que hace que alguien con talento pase de ser muy bueno a ser excepcional, eso que tienen otros grandes deportistas como Rafa Nadal: la corcha.
En el diccionario las acepciones de esta palabra te hacen intuir lo que yo quiero decir cuando la pronuncio. Para mí, corcha es Villa, es Ramos y Pedrito, corcha es hasta Iniesta. Pero si hay un ejemplo de corcha en esta selección ese es, sin ninguna duda, Puyol.

¡Bendita corcha!
No me canso de verlo.

Ha costado más de lo esperado pero el mejor equipo ya está en la final del mundial de Sudáfrica. España comenzó renqueante este campeonato ya que, quizás por algunas lesiones de última hora, jugadores básicos en este conjunto han llegado muy por debajo de su nivel habitual: Xavi, Iniesta, Xabi Alonso, Torres. Aún así, gracias a una ejemplar defensa, una enorme entrega de todos y a que hasta en los peores momentos España ha seguido fiel a su estilo, han salvado partidos muy duros contra equipos destructivos y peligrosos al contra-ataque y han logrado con mucho sufrimiento un pase histórico para el fútbol español.
Y tras todos estos partidos de infarto, sufriendo mucho sin ver a esa España completa los noventa minutos, por fin ha alcanzado su mejor nivel en el momento decisivo del mundial y contra el rival más peligroso. Un rival que hoy ha parecido pequeño por mérito de España.

Contra Alemania España ha presionado tanto que no ha dejado jugar a su contrincante, ha parado los contraataques sin apenas complicaciones, ha movido la pelota de maravilla y uniendo esa táctica, esa furia y esa calidad técnica que sólo logra unir perfectamente esta selección, han hecho parecer sencillo lo más complicado.
Hoy han jugado todos fenomenal: Casillas de nuevo santo, la defensa infranqueable con Piqué al más alto nivel, tanto defensivo como a la hora de sacar la pelota, Puyol como sólo el mejor Puyol puede ser, Capdevila serio y seguro, al igual que Ramos, mejor que nunca. Xabi Alonso, por fin recuperado, bien en defensa y en los cambios de juego, Busquets perfecto durante todo el mundial, por fin Xavi ha vuelto a ser Xavi durante un partido completo, Iniesta vuelve también ha desplegar su magia como antes y Villa y Pedrito con una movilidad que para mí ha sido la gran clave para revolucionar este partido.
Evidentemente no soy nada objetivo pero creo que España hoy por hoy es la mejor selección de fútbol, la más completa, la que mejor practica ese exquisito fútbol, la que mejor mima el balón, la que crea afición.
Aunque no veo a Holanda más peligrosa que Alemania, hay que ser cauto porque a un solo partido siempre puede pasar cualquier cosa. De todas formas hoy toca celebrarlo y ser optimistas porque si España está a este nivel creo que debe ser Holanda la que nos tema a nosotros.
Espero poder celebrar el domingo lo que ya nos toca por justicia.

¿Alguien recuerda esto? 
Pues bien, comprendí que estaba fondón en lo que a televisión de calidad se refiere. De hecho, desde que los de SLQH no pueden sacar imágenes de Telecinco, Cuatro, Antena3 y Telemadrid, el nombre de Jorge Javier me sonaba a cantante latino o algo así.
Por eso, como todo buen deportista, he intentado entrenarme antes del gran reto. Realmente me ha costado comenzar porque siempre lo posponía para el siguiente lunes (como todo lo demás). Pero como tenía la impresión de que ya no llegaba a tiempo a la operación bikini, al final me puse a ello. Y lo hice comenzando a ver pequeños trozos de DEC, AR, el Diario de Patricia, la Noria... Así, poco a poco, para ir aclimatándome. Cuando sentí las primeras arcadas propias del duro entrenamiento, comprendí que estaba preparado para ver pequeñas dosis de Sálvame. Para ir conociendo a mi enemigo, ya sabéis.
He visto como comían, bebían, discutían, “cantaban”, enseñaban su ropa interior, se cambiaban de ropa los unos con los otros, hablaban por el móvil, y se hartaban de decir gilipolleces hacer profundas reflexiones. Y después de ver todo eso y descubrir que un programa de televisión se puede hacer simplemente juntando un montón de descerebrados excelentes profesionales y dejar que cada uno haga lo primero que se les pase por la cabeza, tengo que comunicaros que me rindo, he fracasado, ¡me he zurrado!
He tenido que alternar las sesiones televisivas con visitas al psicólogo y creo que tendré pesadillas con Carmele el resto de mi vida. Por eso me rindo y juro no veré Sálvame, ni entero ni a trozos. Nunca más.
De hecho, lo dejo por prescripción facultativa ya que después de un exhaustivo reconocimiento, el equipo médico que ha llevado mi caso me ha prohibido terminantemente volver a ver Telecinco. Al comunicármelo, comencé alarmado un pequeño diálogo que me dejó aún más horrorizado...
Yo: ¡pero, es que el mundial es en Telecinco! Al menos déjeme ver el fútbol, por favor.
El doctor: usted sabrá lo que hace pero yo no me responsabilizo de las secuelas que J.J. Santos le pueda provocar.
Siento haber fracasado en mi primer gran reto. No creo que haya decepcionado a mucha gente, salvo a mí. Aún así espero poder levantarme de nuevo y conseguir nuevos desafíos. ¿Alguna idea?
De momento deshojo la margarita para decidir si me arriesgo a ver lo que queda de mundial, quizás bajando el volumen...