Huelgas varias y miserias del hombre
Posted: 29/6/10 by Dat in Etiquetas: politica, sociedad, tontos- ¿A dónde vas Paula con tanta prisa?
- Al mercadillo, que voy a comprarme unas cosillas para el veranito.
- ¿No irás en metro, no?
- Claro que sí, ¿por qué lo dices?
- Están en huelga, hija. Ahora iba yo a ver si puedo coger el autobús para ir a trabajar. Que si no, me tocará pagar un taxi.
- ¡En huelga! ¿Y por qué?
- Porque les bajan el sueldo, me han dicho. ¡Ya ves!
- ¡Qué gentuza! Vamos, vamos. Qué gente más insolidaria. ¡¿Y qué culpa tenemos los demás?! Que apechuguen ellos, ¿no?, que ya apechugamos los demás con lo nuestro sin molestar a nadie. Vamos, que tenía ya hechos yo mis planes y ahora, porque esta gente no quieren trabajar, me tengo que volver a casa.
- Ya ves, hija. Y yo a gastarme el dinero que no tengo en un taxi. Y en mi dinero no piensan, ¿no? Sólo en que les bajan su querido sueldo. Iba un piquete de esos diciendo que si es ilegal, que no se pueden romper a la ligera los contratos, que el trabajador tiene derechos, que si patatín que si patatán. Sí, pero la que se jode soy yo.
- Ilegal, ilegal. Si es que tienen excusas para todo. ¡Unos vagos! Eso es lo que son. Como los funcionarios, esos sí que tienen morro. Encima de que tienen un trabajo para toda la vida se quejan porque les bajen el sueldo un poquito. ¡Pero si están forrados! Vamos, que conozco yo uno que gana 1200 euros al mes. ¿Para qué quieren más? Para irse luego al bar y de compras.
- ¿Y qué me dices de los controladores esos de los aviones y los pilotos? Otros que tal bailan.
- Mientras más tienen más quieren, niña. Que no hacen nada y encima se quejan.
- A ver si me bajan a mí el sueldo, a ver dónde están luego. Verás como luego no hacen huelga para que me paguen a mí.
- Desde luego, niña. Pero vamos, que eso a ti no te va a pasar porque tú quieres trabajar, no como éstos que sólo quieren ganar más y más sin dar un palo al agua.
- Si es que bastante tenemos hoy en día con poder trabajar... Entre éstos por un lado y los inmigrantes por otro, que nos quitan el trabajo y trabajan por cuatro duros, no sé qué va a ser de nosotros.
- Di que sí, que como tú tenían que ser todos. Me voy, que me enciendo con esta gente tan egoísta.
- Adiós guapa.
Así somos, tan especiales nos creemos. Tan sordos somos que ni siquiera escuchamos nuestras incongruencias. Ciegos por conveniencia buscando una excusa para sentirnos mejor con nuestra miserable vida y nuestra miserable conciencia.
Espero que algún día toda esa gente que cree que la única causa justa es la suya propia pueda ver más allá de sus narices. Para que intenten valorar el esfuerzo, valentía y desesperación de aquellos que luchan porque haya justicia. Como este caso en el que luchan para que no se limpien el culo con aquellos logros que tanto ha costado conseguir. Y esto va también para esos que luchan ahora, para que no olviden sus malos tragos a la hora de valorar los ajenos, para que no se vuelvan de repente sordos y ciegos.
Primero vinieron a buscar a los comunistas y yo no era comunista, así que no hablé.
Después vinieron por los socialistas y los gremialistas, pero no era lo uno ni lo otro, así que no hablé.
Después vinieron a por los judíos, pero yo no era judío, así que no hablé.
Y cuando vinieron a por mí, ya no quedaba nadie que pudiera hablar por mí.